Habìa una vez un niño llamado Gustavo, el cual era muy alegre, pero, eso sí muy rebelde . A Gustavo le encantaba la música por eso todos los días antes de dormir su mamá lo regañaba y
a que derrochaba mucha energìa en cosas innecesarias.
Todos los días se repetía la misma historia pero, siempre todo seguía igual,Gustavo no escuchaba las palabras de madre, ya que nada de lo que ella decía día tras día le importaba.
Después de un día tan agotador, Gustavo estaba tan exhausto, que ni siquiera le provocaba hacer nada, sólo quería descansar y planear otra travesura para el día siguiente, a las cuales estaban acostumbrados sus compañeros y profesores, por esta razón Gustavo fue expulsado de cinco colegios.
Su madre ya cansada y deseperada de la situación no sabía qué hacer con su hijo tan travieso y rebelde.Así que se encerró en su cuarto para pensar como hacerle entender a Gustavo lo importante que era ahorrar energía.
Después de aquellas largas horas de tanto pensar, pensar y pensar, hasta que por fín chúss¡¡ se le vino a la mente una idea estupenda que de sólo pensar en ella la madre de Gustavo se carcajeaba de la risa y decía: ¡Si no quieres entenderme por las buenas, entonces prepárate para lo peor!. Gustavo por otro lado ni siquiera se imaginaba lo que estaba planeando su madre.
Sólo estaba concentrado en la travesura que haría el día siguiente, así que agarró a su hánster que estaba en una pequeña jaula y lo encerró en una caja de zapato para tenerlo preparado Así pasaron las horas hasta que por fin salió el sol,Gustavo estaba preparándose para aquel día tan emocionante para el; pero horrible como siempre para su madre.
La señora estaba preparando el desayuno y mientras pensaba en poner en marcha aquel maravilloso plan, y se decía en voz baja: ¡Actuaré como si nada estuviera pasando,lo trataré mejor que nunca para que no sospeche!.
FIN......
elaborado por:Yorgelis Bejarano 8vo A
Johana Chirinos
a que derrochaba mucha energìa en cosas innecesarias.Todos los días se repetía la misma historia pero, siempre todo seguía igual,Gustavo no escuchaba las palabras de madre, ya que nada de lo que ella decía día tras día le importaba.
Después de un día tan agotador, Gustavo estaba tan exhausto, que ni siquiera le provocaba hacer nada, sólo quería descansar y planear otra travesura para el día siguiente, a las cuales estaban acostumbrados sus compañeros y profesores, por esta razón Gustavo fue expulsado de cinco colegios.
Su madre ya cansada y deseperada de la situación no sabía qué hacer con su hijo tan travieso y rebelde.Así que se encerró en su cuarto para pensar como hacerle entender a Gustavo lo importante que era ahorrar energía.
Después de aquellas largas horas de tanto pensar, pensar y pensar, hasta que por fín chúss¡¡ se le vino a la mente una idea estupenda que de sólo pensar en ella la madre de Gustavo se carcajeaba de la risa y decía: ¡Si no quieres entenderme por las buenas, entonces prepárate para lo peor!. Gustavo por otro lado ni siquiera se imaginaba lo que estaba planeando su madre.
Sólo estaba concentrado en la travesura que haría el día siguiente, así que agarró a su hánster que estaba en una pequeña jaula y lo encerró en una caja de zapato para tenerlo preparado Así pasaron las horas hasta que por fin salió el sol,Gustavo estaba preparándose para aquel día tan emocionante para el; pero horrible como siempre para su madre.
La señora estaba preparando el desayuno y mientras pensaba en poner en marcha aquel maravilloso plan, y se decía en voz baja: ¡Actuaré como si nada estuviera pasando,lo trataré mejor que nunca para que no sospeche!.
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Johana Chirinos
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