Había una vez una laguna muy hermosa, tan hermosa que vista de varios puntos geográficos era la más bella del mundo, tenía unas preciosas aguas cristalinas y sin ningún tipo de contaminación; en el pueblo le llamaban la laguna mágica, ya que poseía grandes riquezas para sanar a las personas
Lionel un muchacho muy luchador, alegre, amistoso y súper divertido a él le encantaba pasarla bien con sus amigos y sobre todo practicar su deporte favorito (karate-do).
Lionel entusiasmado por la próxima competencia de karate-do porque queria ganar muchas medallas de oro para demostrarles a todos sus amigos todo lo que podía ganar haciendo el bien y no el mal a la comunidad.
En el pueblo” La Villa” era donde estaba la laguna mágica, un pobre joven llamado Tomás estaba muy enfermo porque tenía una enfermedad llamada cáncer y estaba muy asustado por su gravedad porque pensó que se iba a morir.
Él esperaba la visita de un pariente muy lejano que nunca había conocido, y justamente se trataba de Lionel ese chico luchador, amistoso y divertido.
Tomás y Lionel estaban felices porque al fin se conocieron y tenían mucho tiempo para contarse todo lo que habían vivido hasta ahora.
Ellos quisieron recorrer todo el pueblo y llegaron a la laguna mágica, todos tenían fé en la laguna pero, Lionel no quería que Tomás se ilusionara con un mito de que la laguna lo podría sanar. Regresaron a la casa de Tomás porque se sentía muy mal estaba muy débil por la caminata que habían realizado en el pueblo.
Con el pasar del tiempo Tomás se sentía peor ya que su enfermedad se estaba desarrollando muy rápido y el descubrió que no era la laguna mágica que curaba a todos los enfermos, sino que era la fé de cada uno de ellos que tenían que curarse y el pleno apoyo de su familia.
Lionel tenía que regresar a la ciudad porque ya iba ser el torneo de karate-do, así que Lionel le hizo una propuesta de ir a la ciudad ya que el cáncer es una enfermedad que actúa por tumores que se forman en el organismo y Lionel decidió ayudarlo y ponerlo en tratamiento de quimioterapia que es un tratamiento que actúa tratando de debilitar y desaparecer los tumores.
Así que Tomás decidió irse con su primo Lionel porque lo más importante para él era curarse para poder así recuperar todos esos años que perdió sin conocer a su primo Lionel y que el mayor tratamiento era su autoestima y la gran fé que tenia de que si se iba a curar con el apoyo de Lionel.
Cuando llegaron a la ciudad Lionel vió muy mal a su primo y decidió no ir al torneo de karate –do, para así cuidar a Tomás y dedicarle más tiempo. Pero Tomás le dijo que no, que él iba a estar bien y se iba a sentir muy orgulloso si Lionel llegara con sus medallas de oro.
En el torneo Lionel tuvo un éxitoso combate y gano tres medallas de oro. Cuando regresó a su casa Tomás lo recibió muy mal porque estaba casi muerto en su cama, Lionel lo agarró y lo llevó rápido a un hospital, urgente lo atendieron y le dijeron a Lionel que estaba muy delicado de salud.
Al cabo de un tiempo Tomás se recuperó un poco y habló con Lionel y le dijo que si se moría no llorara porque él se iba a morir feliz de haber conocido a un ser tan fuerte y especial para él.
Lionel como siempre de luchador por lo que quiere le dijo que él no se iba a morir se iba a salvar y que el tratamiento sí iba a funcionar como ha venido funcionando hasta ahora.
Tomás siguió con el tratamiento y con el apoyo de Lionel, después de varios meses ya Tomás estaba muy recuperado de su enfermedad.
A Tomás le encantaba escribir entonces hizo una carta de todo lo que había pasado con su enfermedad y una parte de la carta decía:
“Todos en cualquier momento tenemos momentos difíciles, hay que ser más comprensivos y hay que valorar a los seres que siempre están ahí apoyándote en las cosas buenas y malas que nos trae la vida. La laguna mágica solo era un mito para que la gente se sanara con fé y entusiasmo.
Así que los que tengan cáncer como yo, no piensen que todo está perdido, déjense querer y apóyense en sus seres queridos, amigos y en sus propios sentimientos aunque la enfermedad no se pueda curar, de un día a otro la vida cambia sin darse cuenta nos trae obstáculos para comprobar la fuerza interna que cada ser humano tiene, y así triunfar en la vida no solo como persona sino como lo soñamos".
Lionel a leer lo que estaba escribiendo Tomás, se sintió muy orgulloso de él y que siempre hay que seguir adelante sin importar lo grande que sea el problema.
Tomás y Lionel compartieron mucho, se trataban como hermanos y siempre estaban orgullosos uno del otro.
Tomás siguió con sus tratamientos y Lionel con sus entrenamientos de karate-do. Lionel iba a tener una ceremonia porque iba a pasar para cinta negra y quería que tomas lo acompañara, pero Tomás no quería ir porque no quería que los demás se enteraran de su enfermedad, ya que temía ser rechazado y no quería volver a pasar por lo mismo que ya había pasado en su pueblo.
Después de un rato Lionel convenció a Tomás de que fuera a la ceremonia, después de un rato cuando iban en camino Tomás de dice a Lionel ¡¡GRACIAS!! Y Lionel le dice ¿por qué? – porque tu en todos momentos de mi enfermedad me has apoyado sobre todas las cosas por eso gracias.
Lionel le dice tranquilo que siempre voy a estar allí para lo que necesites, gracias a ti por ser mi primo.
Ellos se distrajeron mucho por tan grata conversación ya habían llegado al lugar de la ceremonia, Tomás entró con mucho temor al rechazo de las personas, pero no fue así, después de tres minutos llegó un muchacho llamado Joseph un chico que practicaba karate-do, se hicieron amigos y a Joseph se le ocurrió contarle toda su vida , es decir todo lo que pasó durante su enfermedad (cáncer).
Tomás se sorprendió mucho porque era la misma vida que él había pasado.
Tomás por curiosidad le hizo una pregunta ¿después te tu enfermedad que hiciste? – el respondió me inscribí en karate-do para mantener mi estado físico y mental, y sobre todo eterna paz.
Tomás siguió pensando y dijo en su mente, que si él hacía lo mismo podría ser que se curara.
Él le comentó a su primo Lionel y le dijo que definitivamente se inscribiría en karate-do, Lionel le dijo que le agradaría compartir un combate con su primo.
Después de tres años Tomás llegó a cinta marrón, ellos en un festival tuvieron que demostrar lo que ellos aprenden dentro de su academia, lo hicieron muy bien le dijo Joseph y tú Tomás en tan poco tiempo y ya eres todo un experto, ni yo que me tarde más de tres años para llegar a donde estoy.
A ellos tres se les presentaba dentro de poco un torneo donde los únicos que participarían eran Lionel, Joseph y Tomás, ellos iban a combatir con otros tres representantes de otro equipo.
Había llegado el día del torneo, ellos ganaron en el primer lugar ellos fueron los mejores del combate.
Ya a Tomás se le estaba levantando el ánimo y se estaba sintiendo mejor, un día le tocaba cita para el médico, el doctor que lo atendió se llamaba José; se quedó sorprendido cuando vio a Tomás, fue como un milagro para el doctor, ya que Tomás la última vez que estuvo en el hospital casi se muere.
Cuando salió de la oficina del doctor salió con una sonrisa grandísima, porque el doctor le había dado a la gran noticia que los tumores que se les había formado ya no estaban,
Los dos muchachos Tomás y Lionel salieron felices y para celebrar, junto a Joseph se fueron a la gran laguna mágica, se divirtieron mucho dentro de las aguas cristalinas de la hermosa laguna, por la gran noticia de que Tomás se había curado totalmente de su enfermedad.
"Hay que tomar en cuenta que muchas personas tienen momentos difíciles en la vida, y nunca hay que darse por vencido, por mas grave que sea nuestro problema hay que tener fé y confianza en uno mismo"........
Elaborado por: Ovalles Kevin
Parraga María
Grado:8º "B"
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